Cada sesión es un espacio de escucha respetuosa, confidencial y personalizada, donde te acompaño a explorar el sentido biológico de tu síntoma y a tomar contacto con las vivencias que puedan estar en el origen del conflicto.
El proceso es completamente online, lo que te permite acceder desde cualquier lugar, con comodidad y seguridad.
Durante el encuentro, utilizo ejercicios y técnicas basadas en mi experiencia, que se adaptan a tu historia personal y a lo que tu proceso necesita en ese momento.
La frecuencia habitual de las consultas es de una sesión cada 25 días aproximadamente, y cada encuentro dura entre 45 minutos y una hora y media, dependiendo de lo que estemos trabajando.
El número de sesiones varía según el síntoma y el proceso de cada persona. No se trata de una terapia prolongada, sino de un acompañamiento profundo, preciso y transformador, enfocado en acceder al origen del conflicto biológico y abrir un camino de comprensión y bienestar.
Mi propósito es que cada sesión sea una oportunidad para comprender, liberar, resignificar y reconectar con tus propios recursos internos.